Asesoría de imagen

¿Qué es?
Un día un moralista francés del siglo XVII escribió: “El que tiene imagen y no la educa, tiene alas, pero no tiene pies”. Lo que Michel de Montaigne quiso
enseñarnos es que por mucho que intentes arreglarte sino proyectas la imagen adecuada, no te sirve de nada.
En los tiempos que corren nadie tiene tiempo para nada y es un error porque sin darnos cuenta descuidamos lo más importante que tenemos “NOSOTROS”.

¿Qué es un asesor de imagen?
Recibe el título de Asesor de Imagen Personal toda persona que, después de cursar los correspondientes estudios superiores, está especializada en analizar y aplicar, profesionalmente, todos los procesos físicos, estéticos y psicológicos relacionados con el asesoramiento de la imagen global.

El asesor de imagen empieza a despuntar en los años 90. Los actores, actrices, cantantes, deportistas de élite, tenían que aportar su físico a firmas exclusivas y para ello requerian de una imagen impecable, pero no sabían como conseguirlo a parte que no podían invertir el tiempo necesario para aprenderlo. Había una necesidad y se tenía que cubrir.

En este siglo la figura del Asesor de Imagen ya forma parte de la vida de muchas personas: Abogados/as, políticos/as, economistas, ejecutivos/as, secretarias de dirección, administrativos/as e incluso amas de casa porque la mayoría de las veces son “esposas de”.
Todas estas personas conocen los beneficios que les aporta este servicio:

ADQUIRIR NUEVOS HABITOS
MÁS SEGURIDAD
MÁS EQUILIBRIO
CAPACIDAD DE CONSEGUIR SUS OBJETIVOS
AFRONTAR CUALQUIER SITUACIÓN
GUSTAR MAS A SU PAREJA
AUMENTAR SU AMOR PROPIO Y AUTOESTIMA
ESTAR A LA MODA
AHORRAR TIEMPO Y DINERO

LA IMAGEN ES MUCHO MAS QUE  LA BUENA PRESENCIA

Hay Imagen en nuestro tono de voz, en nuestra forma de comunicarnos (en persona y por teléfono), en nuestra vestimenta y en nuestro estilo personal. Las empresas también cuentan con una Imagen Corporativa y saber manejarla en forma eficiente es parte del marketing institucional.

El vestir revela la identidad de una persona, lo que es en realidad. La ropa que nos ponemos a diario es la que nos descubre ante el mundo. Es ésta la que proyecta lo que somos en nuestro interior a lo que aspiramos a ser. La ropa queda bien a las personas que la llevan puesta porque éstas se encuentran cómodas con lo que visten y no porque sea la «última moda» usarlo.

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